Pole Dance, Burlesque y Viva el Striptease!

Sin duda pole dancing es un deporte riguroso y requiere un cuerpo fuerte. Y cuando se hace bien, con fluidez, gracia y originalidad, puede ser un arte. Lo comento porque la barra me parece mucho más un deporte que un baile y son pocas las personas que pueden realmente bailar en la barra.

Para striptease, sin barra, tenemos muchísimas herramientas y no hace falta tener un físico atlético, aunque también lo podemos tener. Con imaginación y habitando el cuerpo, todo el espacio se vuelve en nuestro campo de juego.  Es un acto altamente sensual y no tiene porqué incluir contacto físico con un público, ni siquiera tener un público.  El alma de una misma puede ser público suficiente según cada cual.

Luego tenemos el Burlesque que es el lado teatral del striptease.  El estilo de burlesque que yo enseño lo podríamos llamar "Burlesque Creativo", porque pongo la importancia en sacar de cada una lo que le mueve para el desarrollo del personaje y del pequeño cuento se se trasmite con los gestos corporales y con la picardía. Digamos que burlesque es striptease en lo cual se desarrolla más el cuento y el personaje a través de lenguaje corporal.  Es altamente divertido porque el juego es el máximo.

El striptease tiene mala fama, el pobre. Me gustaría que se restaurase a un lugar digno: al arte.  No tiene porqué ser vulgar ni mucho menos.  Forma parte del continuum donde encontramos el deporte que es el pole dance y el teatro que es burlesque.  Striptease es la base en donde se encuentra la fuente de la fuerza femenina.  Para hacer esto no es necesario ni barra ni lentejuelas. Simplemente bailar en curvas, expresando tu sagrado erotismo de la forma en la que salga, jugando con insinuar y quitando esa u otra prenda, sintiendo la prenda deslizar por la piel, acariciada por el aire, sintiendo allí el alma en el momento presente. Es un acto de belleza, erotismo, autoestima, y contacto con la diosa que es tu cuerpo y alma simultáneamente.