Una vez más publico esta foto porque habla mil palabras. Representa perfectamente la danza interna y física que hacemos -- en los talleres, sesiones particulares y en otros caminos que hacemos como mujeres -- para conocernos a nosotras mismas, el cuerpo y espíritu, dejar atrás lo que arrastramos y que nos pesa para reconectar con nuestra fuerza, nuestra naturaleza femenina: enorme, gozosa y líquida, como el mar.